El 29 de agosto de cada año es la fecha instaurada para recordar en Argentina el Día del Árbol. La iniciativa se debe al doctor Estanislao Zeballos en el año 1900.
Anteriormente, Suecia fue el primer país en el mundo en instituir el Día del Árbol, en 1840.
En consonancia, desde el año 2007, en Argentina existe la Ley 26.331, de Presupuestos Mínimos de Protección Ambiental de los Bosques Nativos, también conocida como “Ley de Bosques”.
Sin embargo, la problemática en torno a la deforestación permanece y aumenta día a día. Informes y relevamientos de Greenpeace durante 2017, determinaron que la mitad de los desmontes que se realizaron en el Norte de Argentina fueron ilegales.
Los servicios ecosistémicos que brindan son muchos y muy importantes para la resiliencia de nuestra querida Tierra: transforman el dióxido de carbono, minimizan los riesgos de inundación, evitan la erosión y contribuyen a revertir el cambio climático, entre otros.