
Sobre los representantes
En verdad todos los clubes, debieran saberlo. Y cuando me refiero los clubes, digo a sus hinchas y adherentes. Y menciono a Racing por la reacción que ha causado entre sus adeptos, el hecho de que muchos jugadores que ha incorporado en esta última apertura del libro de pases que permite el órgano rector del fútbol de la Argentina, la AFA, sean representados por la misma persona, Christin Bragarnik.
Racing e insisto, todos los clubes, deben saber que no hay ninguna posibilidad de que ningún técnico ni jugador pueda jugar sin la intervención onerosa de un representante. Los dirigentes necesitan de ellos para poder realizar los negocios que antes de beneficiar a los clubes, lo hagan con sus patrimonios personales.
No es nuevo. Ya el afamado periodista Dante Panzeri lo había escrito en la década de los años 60 en su libro “Delincuencia y gansterismo en el deporte”. Vale la pena recordar que Panzeri era repudiado por la casi totalidad de los dirigentes de los clubes de fútbol, por los directivos de los principales medios de difusión y por colegas del periodismo. A nadie convenía una pluma de tal calibre.
Quiero ser más preciso y para ello voy a remitirme a lo que me contaba una gran persona, Higinio Restelli, director técnico de fútbol que nació y falleció en La Plata. Para situar al lector en la persona de Restelli debería ser suficiente decir que era de los pocos platenses que podía concurrir a las sedes de los clubes Gimnasia y Esgrima, con el que se sentía más identificado y Estudiantes. En ambos desarrolló su proficua labor en las divisiones formativas. Y más aún, era de los pocos que tenía la entrada permitida en los cafés o lugares de reunión de la ciudad de La Plata, de uno u otro club. Los que son de esa ciudad saben lo que esto significa. Los que no conocen sepan que los hinchas de cada cual de los dos eternos rivales, no puede ingresar a un sitio identificado con el rival sin riesgos de pasar un mal momento. Tal la rivalidad.

De modo que decir que Restelli era respetado en cualquier lugar y por cualquier aficionado ya avala su personalidad y califica de manera cabal los conceptos que pudiera verter. Pues bien una de esas tardes tomando café con Higinio me dijo: “¿Sabes por qué no me contratan para dirigir primera división?”…” Porque no tengo jugadores ni llevo jugadores por indicación de representantes. En cada Club que he estado he priorizado a los de las divisiones inferiores y recién cuando entendía que debía reforzar alguna línea…consultaba con muchos de esos anónimos que conocían mejor que yo y los representantes, a los mejores o de más rápida adaptación…”
Aquí cabe acotar una anécdota de cuando Restelli estuvo en Trelew, logrando clasificar a un equipo de esa ciudad, Independiente, por primera y única vez a la máxima categoría de los torneos de AFA, el por entonces Torneo Nacional. Contaba Higinio que una vez lograda la clasificación los dirigentes se aprestaban a viajar a Buenos Aires en busca de refuerzos, como él decía “con una valija llena de plata”. “Escuchen!…que es lo que van a hacer? Les dijo…”¿Cómo nos irá trayendo todos los refuerzos que puedan? ¿Qué puesto ocuparemos, mitad de tabla? ¿Y si no traemos a nadie…últimos…qué más da…? …”Quédense y utilicen ese dinero para ampliar las tribunas y comprar vestimenta y equipamientos”
Los dirigentes le hicieron caso. Todavía hoy en Trelew, Higinio Restelli es poco menos que un prócer. Supera en fama a Maradona y Messi.
Pero es claro que personas así no les conviene a los dirigentes, que endeudan los clubes mientras acrecientan sus patrimonios y la de los representantes. Necesitan de estos y de los directores técnicos que recomienden la contratación de jugadores no por su calidad o adaptación al estilo de juego, sino por los porcentajes que les reditúen.

Espero que muchos hinchas y apasionados del fútbol, sobre todo los más jóvenes, puedan leer esto, sabiendo que entiendo perfectamente de sus anhelos por ver triunfar al equipo de sus amores. Amores desinteresados demás está decir. Y mientras lo analizan pregúntese como es posible que muchos de los jugadores que no actuaron de forma destacada defendiendo los colores de tu club, lo hacen mejor en otro. Lo he escuchado muchas veces: “Nos hubiésemos quedado con Fulano que rindió mejor que Mengano, que vino a suplirlo, supuestamente para mejor”.
Y esto nada tiene que ver con la calidad de cada uno, ni con la entrega que diera en uno u otro caso. Tiene que ver con la adaptación de que cada jugador haga en determinado equipo, corregida con una adecuada concepción táctica y estratégica. En lugar de ello, es utilizada por los dirigentes para concretar nuevas operaciones de pases y compras, la manera en que parte de los dineros de las transacciones quedan en sus bolsillos.
De manera que hinchas de Racing…y los demás clubes…No es un problema de Cocca, al fin de cuentas un técnico que sabe tanto o tan poco como los demás, ni de Bou, similar a otros que han pasado por el Club y otros que contratarán…por citar los emblemáticos ejemplos. El problema es de los que dirigen, que debieran pensar en lo mejor para la Institución, que es decir, nada menos, que SU GENTE.
Mario R. Martín