Como era previsible y lo habíamos escrito mucho antes de las elecciones del 25 de octubre la conjunción de la Unión Cívica Radical y el PRO de Mauricio Macri resultó decisiva para producir un profundo cambio en la relación de fuerzas entre los intendentes de la sexta sección electoral.
Este frente constituido en “Cambiemos” obtuvo un amplio triunfo en distritos donde dominaba la UCR, como los casos de Adolfo Alsina, Coronel Dorrego, Puan, Salliqueló y Pellegrini, en dos distritos dominados por muchos años por frentes vecinales adscriptos al kirchnerismo como Coronel Suárez y Coronel Rosales, menos holgados como en Bahía Blanca, Tornquist y General La Madrid y uno sorpresivo como Patagones.
El Frente para la Victoria perdió 7 intendencias, las mencionadas Bahía Blanca, Coronel Rosales, Coronel Suárez, General La Madrid, Patagones, Tornquist y Villarino, a manos de un partido vecinal. Ahora gobernará apenas 8 de las 22 tras imponer sus candidatos en Benito Juárez, Daireaux, Gonzales Chaves, Guaminí, Laprida, Monte Hermoso, Saavedra-Pigüé y Tres Lomas.

Los candidatos vecinalistas retuvieron solo Tres Arroyos, donde el intendente oportunamente dio un giro apartándose del kirchnerismo para alinearse con Macri y ganaron 2: Coronel Pringles y Villarino.
El análisis que surge es que ante la masiva ola a favor del cambio que significa Mauricio Macri y que en la sexta sección evidenciaba una marcada simpatía se mantuvieron inmunes los intendentes Alfredo Fisher (Laprida), Néstor Álvarez (Guaminí), Julio Marini (Benito Juárez) y Hugo Corvatta (Saavedra) los cuatro distantes del kirchnerismo, a lo que se suma, en el caso de Fisher y Álvarez, su buena gestión producto de haber conseguido favores de sus padrinos políticos Florencio Randazzo y Cristina Alvarez Rodriguez, respectivamente.
En Daireaux resultó sorpresivo el triunfo de Alejandro Acerbo (FPV, actual miembro del directorio del Banco Nación), pero que colaboró con la ciudad y con un gobierno opositor en una actitud que la ciudadanía valoró. Para nuestros lectores esto no resulta novedoso pues hemos escrito en nuestras páginas de la calidad de los dirigentes de Daireaux, de diferente pensamiento pero consustanciados en trabajar por la localidad antes que por sus ideas o intereses.

Más sorpresivo aún resultó el triunfo del Frente para la Victoria en Monte Hermoso, donde un intendente sospechado de apañar prácticas delictivas fue reelecto. Los ciudadanos indignados lo atribuyen al fraude que significa llevar a votar electores que no tienen residencia en la localidad balnearia.
La otra valoración que hay que hacer de la ciudadanía de la sexta sección, es que dentro de la masividad del voto a Cambiemos que hizo triunfador a sus candidatos a gobernador (Vidal) y presidente (Macri), en el caso de los intendente privilegió cortando las boletas a favor de quien considera mejor para su terruño. Un avance muy positivo en el comportamiento electoral. Con el mismo criterio todo hace suponer que en la próxima elección por el ballotage el voto será masivamente respaldatorio al candidato que apoya la elegida gobernadora de la provincia. Solo una cuestión de sentido común.