Un amigo, siempre una fuente altamente confiable, supo de donde habían salido los 300.000 dólares que fueron encontrados en el botiquín del baño adyacente al despacho de la entonces ministra de Economía, Felisa Miceli, que no pudo explicar su procedencia y por lo fue condenada e inhabilitada.
Fue una empresa de Bahía Blanca, nos dijo este amigo, periodista él.
- ¿Cómo lo sabes?, le pregunté.
- A mí me lo dijo un amigo. Me mostré escéptico en principio porque se trata de un empresa de gran tamaño, con buen prestigio entre la gente. Pero este me aseguró que había sido a cambio de la firma de una resolución sobre exención de impuestos que los beneficiaba mucho.
- Claro, imagino tu sorpresa, ¿por qué precisamente una empresa de Bahía Blanca, no? supongo te habrás preguntado, pero también imagino te habrás hecho la otra pregunta que surge ¿Por qué involucrar a esa empresa y no otra, habiendo miles de posibilidades?, siendo claro que se trataba de dinero mal habido. E inmediatamente recordé a la esposa de Vandrebole…¿cómo se le iba ocurrir involucrar a un ministro de la talla de Boudou…Solo porque era cierto.
- Tal cual. Por eso me decidí a investigar. Busqué Felisa Miceli + Bahía Blanca en Google. Encontré con que había estado en Bahía Blanca, dando una disertación invitada por esa empresa unos dos meses antes del hallazgo del dinero. Luego busqué otras noticias que pudieran relacionar a la citada empresa con resoluciones del Ministerio de Economía….y bingo! Allí estaba! La resolución que exceptuaba a esa empresa del pago de un impuesto que se le cobra a otras, con la firma de Felisa Miceli y fechada una semana anterior a la sospechosa aparición del dinero en su baño del ministerio. Con esas fechas busqué viajes en avión de gerentes o directores de la firma comercial y también coincidían. Finalmente con un amigo de uno de los Bancos con que operaba la empresa y un experto informático rastreamos las operaciones de esas fechas que aparecían en su contabilidad y la de la Casa de Cambios donde generalmente hacían las operaciones de cambio de divisas extranjeras. Todo cerraba.
- Dime el nombre de la empresa, le dije a mi amigo periodista.
- Me lo guardo para mí y solo un reducido círculo de personas que se jamás me traicionarán… ¿O me crees estúpido. Cómo podría saberlo yo y no los investigadores? Si lo saben y no lo dijeron no estamos en presencia de bebés de pecho. ¿Qué sabes lo que puede pasarme? No olvides que mataron al fiscal Nisman con total impunidad…. ¿quién se preocuparía de mi muerte, un don nadie como soy, por más sospechosa que fuera y así dejara esto escrito en manos de alguien para llevarlo a la justicia en ese caso?
- Lamento no me tengas confianza, pero igual te lo agradezco. Te comprendo…
Mario R. Martín