La decisión de migrar dentro o a través de diferentes países está influenciada por un intrincado conjunto de factores. El informe recientemente publicado por FAO examina las complejas interconexiones que determinan la decisión de la población rural a migrar.
La pobreza, las oportunidades de empleo, los conflictos, el hambre, la degradación ambiental y las crisis climáticas son algunos de los aspectos que se exploran en la publicación.
Mientras que la relación entre la seguridad alimentaria y la migración puede ser directa, como una vía para escapar del hambre, los vínculos entre agricultura, seguridad alimentaria y migración pueden ser también indirectos, pensados como una estrategia para hacer frente a la incertidumbre de los ingresos.
El informe evalúa el impacto de la migración en los países de origen y de destino con un enfoque en áreas rurales y el sector agrícola.
En la publicación también se analiza cómo las políticas agrícolas y sociales pueden abordar estos desafíos y capitalizar las oportunidades creadas por las tendencias migratorias.
La organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (IFAD), la Organización Internacional para las Migraciones (IOM) y el Programa Mundial de Alimentos (WFP), han trabajado conjuntamente para este informe, permitiendo analizar los factores directos e indirectos detrás de migraciones, agricultura, seguridad alimentaria y desarrollo rural.
El informe destaca el papel de la agricultura y el desarrollo rural al abordar los factores adversos de la migración, con inversiones en agricultura sostenible, adaptación al cambio climático y medios de vida resilientes.
Fuente: Multimdios Agreste – Agencia de noticias sobre desarrollo sostenible Hiberoamérica