La China
El día comenzaba, una vez más, en la estación de Once. Las personas caminaban tan apresuradas como todas las jornadas, sin detenerse a mirar su entorno y hasta chocándose unas con otras, pero una de ellas huía de todo ese caos…. parada al costado de una salida del sitio con su mejor sonrisa. Ella era, ni más ni menos, que la mujer china que todas las mañanas vendía sus pomadas especiales para el dolor, realizadas siguiendo estrictamente, los pasos de una milenaria receta escrita por sus ancestros. Así, al grito de “¡Pomada China! ¡Pomada China!” captaba la atención de los transeúntes. Algunos de ellos se detenían a comprar su eficaz producto, mientras otros intolerantes, la insultaban y le exigían que regresara a su país de origen. Pero a pesar de recibir aquellas agresiones verbales, nunca perdía la compostura, ni su sonrisa. Y es que ella estaba acostumbrada a enfrentar las adversidades desde pequeña, cuando tuvo que abandonar su país junto a su familia y embarcarse a una nueva aventura, en un nuevo país con distintas costumbres, muy diferentes a las que estaba acostumbrada. Pero aun así, a pesar de todos los problemas, aprendió a amar su nuevo destino.
Tal vez en algún momento, aquella dama dejaría de vender en aquél lugar para partir hacia otros sitios, pero una cosa si sería segura… muchas personas nunca olvidarían su simpatía, ya que con la misma invitaba a todo el mundo a ser más optimistas. Fin
El guerrero incansable
Allí marchaba en su corcel negro el guerrero incansable, yendo decidido y sin vacilar para encarar un nuevo desafío.
Y es que siempre batalló contra varios males y problemas, sin perder nunca su ímpetu y su perseverancia, sacando fuerzas en donde algunos otros no la hallan.
Colocándose su reluciente armadura cada mañana, sin importar si afuera de su castillo algún huracán arrasaba con cada lugar al que tuviera que concurrir. O sin importar si los ríos que tuviera que cruzar, desbordaran de lava. Aquél guerrero siempre saldría a enfrentar la adversidad con su mejor cara.
Y así, mientras su caballo galopaba velozmente hacia su objetivo, una lluvia de rocas comenzó a caer sobre ellos.
En ese momento, aquél caballero blandió su espada y con su filo comenzó a rebanar cada una de esas temibles rocas.
Aunque a él ninguna de esas piedras lo asustaban, por lo que a pesar de los daños que aquellas provocaban en su cuerpo, seguía sin detenerse, enfocado en terminar su misión.
Porque siempre supo que las lluvias y los malos momentos son pasajeros y llegan a su fin. Y así, luego de unos segundos que parecían interminables, las piedras dejaron de caer. Por fin, el valiente guerrero y su fiel corcel, subieron a la cima de aquella montaña y contemplaron juntos el sol que resplandecía más que nunca… y brillaba tanto como el futuro que seguramente les esperaría. Fin
La suerte de Eugenia
La lluvia caía incesantemente en las calles de tierra sobre las que, irremediablemente, Eugenia avanzaba. Y es que no tenía otra alternativa, ya que había perdido el último colectivo de la noche y no tenía dinero para pagar un taxi o un remis.
Para ella, su mala suerte no era ninguna novedad, ya que muchas veces había pasado por situaciones tristemente insólitas, como por ejemplo, olvidar su cartera en un bar, o sufrir el robo de su celular al salir del trabajo y sacarlo para escuchar algo de música. Sin olvidar tampoco el racimo lleno de decepciones amorosas, con engaños de las más diversas clases por parte de cada uno de aquellos caballeros imperfectos.
Sin lugar a dudas, el infortunio era algo habitué en su vida… ¡Por eso, por correr presurosa, resbaló y cayó sobre el barro!
Llena de barro, rabia y angustia, Eugenia tomó su rostro con sus manos, tratando de tranquilizarse para no entrar en un colapso nervioso. Buscaba en su mente, algo que pudiera mejorar su día de alguna manera, pero no hallaba nada que la animara. Por eso, comenzó a buscar con su mirada en el suelo, alguna flor, o tal vez alguna piedra preciosa… ¡Algo que hiciera que ese tropezón valiera la pena!
Así, revolviendo el barro con sus manos, Eugenia encontró lo que necesitaba… ¡Una billetera! Descreída de su golpe de suerte, abrió la misma lentamente, para comprobar que tuviera algo en su interior, y para su sorpresa…. ¡Dentro había mucho dinero, tal vez el sueldo y el aguinaldo de aquella persona sin suerte! ¡Por fin, la buena fortuna estaba de su lado!
Alegre como pocas veces en su vida, Eugenia se levantó del barro y prosiguió en su camino. Paso a paso, pensaba en las cosas que podría comprar con ese dinero: ropa, carteras ¡Y hasta tal vez, una nueva notebook! ¡Y todo por estar en el lugar y momento precisos! Pero, repentinamente, su sonrisa se apagó, ya que invadió su mente un pensamiento tan crudo como cierto ¿Y si la persona que había perdido la billetera realmente necesitaba ese dinero? ¿Y si, tal vez, con ese sueldo debía alimentar a su familia? Tal reflexión, la hizo cambiar su actitud y Eugenia comenzó a revisar detalladamente la billetera, para finalmente encontrar el documento de identidad de una joven y una foto de ella junto a dos pequeños, que probablemente serían sus hijos. La dirección del documento de identidad, indicaba que la casa de aquella joven infortunada, estaba muy cerca. Todos aquellos factores, terminaron de decidir a Eugenia, que presurosa y con una gran sonrisa, se dirigía la casa de esa mujer a la que ella le cambiaría su suerte.

Y así, finalmente, al llegar a ese hogar y recibir el agradecimiento de toda la familia y los niños de la joven, Eugenia entendió que la fortuna no depende solamente del azar y que nosotros mismos podemos cambiar la suerte de los demás con un simple y maravilloso gesto. Fin
Adrián Rusak
Redactor y guionista tanto en el campo radial como en el audiovisual.
Co-autor del piloto unitario “Umbrales”. Ha escrito, también en co-autoría, el radioteatro “Jaque Mate” el cual fue representado en la radio del ISER FM 95.5 y en el prestigioso evento “Hecho en Taller” en el Auditorio Gregorio de Laferrère (Argentores).
También ha sido parte del equipo que ha realizado la producción artística de la Radio Soldados FM 87.5, para el relanzamiento de la emisora en el año 2015.
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