La selección argentina de básquet cerró su participación en los Juegos Panamericanos de Lima de la mejor manera, con un triunfo claro por 84 a 66 frente a Puerto Rico. En un torneo que mostró altibajos en el juego del seleccionado nacional, el equipo pudo consolidar sus aspiraciones a la medalla dorada en los partidos clave.
La final ante Puerto Rico se encaró de la misma forma que la semifinal previa contra USA, con la concentración e intensidad que se merecen los encuentros decisivos. El técnico dispuso un juego táctico veloz, que de la mano de un inspirado Facundo Campazzo no dio tiempo de reacción al adversario. Por su parte Luis Scola se alzó como pieza importante del encuentro con 28 puntos y 9 rebotes. La rotación del equipo fue menor a la mostrada en partidos previos y la defensa aguerrida desplegada por los jugadores impidió que se desarrollaran las principales cualidades del rival.
“Seguimos escribiendo nuestra propia historia, que era lo que buscaba este grupo joven”, expresó Facundo Campazzo luego del partido, haciendo alusión a la importancia de consagrarse en el torneo para una selección que se está rearmando, luego de una gloriosa generación dorada que nos puso en lo más alto del básquet mundial.
Son varios los puntos en los que radica la importancia de esta consagración: es el primer título Panamericano de su capitán Luis Scola, el primer título como técnico de la selección mayor para Sergio Hernández y el segundo título panamericano para nuestro país en esta disciplina, luego del oro obtenido en Mar del Plata hace 24 años (1995). Por otra parte, es una inyección de ánimo y confianza para lo que se viene, el mundial de China, el cual comenzará a fines de este mes.
Los jugadores disfrutarán de unos días de descanso, posteriormente viajarán a Europa y Asia donde disputarán una serie de compromisos programados de preparación, ya con miras al mundial. Fechas para agendar: 15/08 rival Brasil, 16/08 Montenegro, 17/08 Francia, 22/08 Japón, 25/08 Rusia y 26/08 España.
Foto: @CABB oficial