El sábado 27 de febrero la empresa La Nueva, tomó la decisión de no distribuir la edición impresa, según lo denunciara el Sindicato de Prensa de Bahía Blanca. El objetivo fue impedir que trascendiera el contenido de un artículo sobre un caso de abuso y violencia policial
La Corriente Comunista Watu emitió un comunicado al respecto reprobando tal determinación a la que califica de antidemocrática y atentatoria de la libertad de prensa.
El silencio daña la democracia
El sábado 27 de febrero la empresa La Nueva volvió a mostrar sus similitudes con el clan Massot: decidió no distribuir los ejemplares de la fecha (que ya tenían impresos) debido a que contenía un artículo que señalaría el posible armado de causas, el accionar irregular de la justicia y las responsabilidades de efectivos policiales, así como una posible investigación contra esos agentes, una vez probado que el proceso policial no fue transparente.
La situación parece no tener precedentes. ¿Podemos imaginarnos el escándalo internacional que se generaría si la gerencia de un diario de circulación nacional hiciera semejante cosa? ¿Qué dirían las organizaciones gremiales y los foros y colegios de periodistas ante un acto de vulneración de libertad de prensa de esta magnitud? ¡Retirar de distribución la tirada completa del día sábado! Uno de los pocos días en que el pasquín sale de manera impresa.
¿Qué es de tanta importancia que les llevó a tomar una decisión que les deja expuestos ante la comunidad en general y la comunidad periodística en particular? ¿Qué contenía ese artículo que la empresa presidida por Gustavo Elías se sintió en la desesperada necesidad de tomar esta escandalosa decisión? ¿Cómo queda ante el país el director de un diario que, debido a compromisos sobre los que no dio explicaciones, decide retirar de circulación el propio periódico en el que está al frente? ¿Qué tiene para decir la Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (ADEPA), cuya Junta de Directores Ejecutivo cobija a este empresario? ¿Qué piensa la clase empresarial bahiense de quien les representa institucionalmente?
Dijimos que parece no tener precedentes. Pero solo parece. Los nuevos ricos se asemejan bastante a la vieja oligarquía de pago chico que, ante la primacía de sus intereses, no dudan en violar la libertad de prensa ni lo que hiciera falta. Tamaña censura nos lleva a recordar aquel 23 de marzo de 1976, cuando una voz en off interrumpe la transmisión de Oscar Alende, horas antes del golpe, diciendo que no iban a tolerar que se difundiera el mensaje de un representante del Oso Soviético. Y listo, se cortó la transmisión violentando el derecho a la información del que debería gozar la ciudadanía.
El silencio daña la democracia y un hecho de estas características debe llamar a toda la dirigencia política no sólo a expresarse respecto de lo sucedido, sino a velar por las garantías que deben primar para que el ejercicio de la libre expresión no sea una vacía formalidad.
Esta es la empresa que recibe decenas de millones de pesos por año, en concepto de pauta oficial. (Porque son ellos quienes verdaderamente viven del estado, a diferencia de quienes apenas tienen una magra asignación). El gobierno municipal ¿seguirá otorgando pauta publicitaria a un medio donde se practica la censura abiertamente y con este grado de impunidad?
Estos sectores serán más ricos y más poderosos en tanto la política no ponga límites a estas prácticas antidemocráticas.
Así como en su momento un sector del periodismo argentino decía en voz alta “queremos preguntar”, desde nuestra organización preguntamos, ¿qué esconde la empresa que gestiona La Nueva? Es una pregunta que debería hacerse todo el arco político democrático. Porque así como tuvieron la facilidad para censurar este artículo, mañana podría ser cualquier voz crítica del arco político aquella que resulte silenciada. Este es el modelo de medios local.
¿Estamos de acuerdo? ¿Lo vamos a aceptar? ¿No pasa nada?
Corriente Comunista Watu Cilleruelo – Bahía Blanca.
La posición de La Nueva
Aunque no hubo información oficial la Empresa se manifestó respecto a la decisión de no distribuir la edición impresa en una nota que le realizara FM De la Calle y que publica en su página web.
“El CEO Fernando Monacelli afirmó que “el director (Gustavo Elías) consideró en su momento que una nota vinculada con un antiguo procedimiento policial irregular contra los hermanos prófugos en el marco de los allanamientos por drogas de la semana pasada, que ocupaba la sección principal del ejemplar del diario que ya estaba impreso, podía horadar la investigación en curso de la justicia federal y evaluó que el interés general de la lucha contra el narcotráfico en la ciudad era superior a la distribución de la edición de ese día”.
“Se trata de un procedimiento realizado en marzo de 2019 contra los hermanos Vidal Ríos que la jueza María Prome anuló por irregular. El abogado Juan Ignacio Vitalini aseguró que se abrió una nueva investigación contra los policías bonaerenses que armaron la causa y quedaron en evidencia por el registro de las cámaras de seguridad del lugar”.
“Monacelli dijo que fueron dadas explicaciones a sus anunciantes y a la organización gremial”.
“Por su parte, el Sindicato de Prensa fue convocado por la empresa para abordar el tema. Les recibió Juan Ignacio Elías, hijo del dueño de La Nueva, quien se refirió a lo ocurrido como un “error”, profirió disculpas al periodista censurado y “garantizó” que el hecho no se repetirá”.